La verdadera realidad callada del Toreo
13 noviembre 2014
Que la Tauromaquia es en sí misma un hecho cultural, ya está hasta en las leyes. Pero si importante es este reconocimiento a todos los efectos a través del BOE, no es menos relevante la multitud de ejemplos que podrían ponerse en la práctica de cómo, en efecto, cuanto rodea al arte del toreo constituye una verdadera realidad cultural, que luego se manifiesta de mil formas diversas.
En esto ocurre algo parecido a lo que sucede con la Universidad española: como sus profesores e investigadores trabajan sin hacer apenas ruido, para muchos pasa desapercibido el importantísimo trabajo que realizan en todas las ramas del saber relacionadas con la Tauromaquia. Sin que casi se den cuenta los taurinos, el arte del toreo cuenta con un fondo de estudios verdaderamente singular, en importancia y en categoría.
Otro tanto ocurre con esta realidad cultural que a diario se plasma, la mayoría de las ocasiones con une escasísimo eco público. En unos casos son programas de mucho peso, como el protagoniza año tras año el Centro de Asuntos Taurinos de la Comunidad de Madrid, que tan sólo durante la feria de San Isidro organiza más de 30 actos culturales diferentes. En otros son ciclos de conferencias, incluso en peñas modestas de los pueblos, pero que también colaborar a mantener encendida la llama del toreo.
Es lógico y natural que los focos se pongan sobre hechos muy relevantes del toreo. ¿Cómo no va a ser así si, entre otras muchas cosas, hoy está en juego que Sevilla recupere o no sus verdaderos niveles artísticos por el mes de abril? Y nada digamos si es que a la palestra se trae el controvertido asunto de la quiebra o no del mundo del toro. Hasta las decisiones de una figura sobre su apoderado o sobre las señas de identidad de su temporada acaban siendo relevantes.
Sin embargo, lo mismo que todo eso nunca habría sido posible sin el sustrato esencial de lo que hemos venido en llamar la “Fiesta de base”, en la que necesariamente se fragua el mañana del toreo, de la misma forma sin este entramado cultural, intenso pero callado, tampoco la Tauromaquia podría ocupar el lugar que, pese a todos los embates que se le dirigen, mantiene en el seno de la sociedad española.
El Centro de Madrid
Sólo con ocasión de las fiestas de la Comunidad y la feria de San Isidro, el Centro de Asuntos Taurinos programó este año un total de 33 actividades culturales: 9 exposiciones, un Congreso y 23 actos culturales y sociales de muy diversa naturaleza. Se trató de un programa intensivo, que bien puede entenderse como la demostración de la rica variedad cultural que rodea a la Tauromaquia. Entre otras muchas, destacó la exposición dedicada a Joselito y Belmonte, el homenaje a Manuel Benítez "El Cordobés" y el XIV Congreso de Tauromaquia, organizado por la Federación Taurina de Madrid, dedicado en esta ocasión a la mujer y los toros.
Una vez finalizada la Feria de Otoño y organizado por el Centro de Asuntos Taurinos y Taurodelta, viene celebrando el II Ciclo de Cine y Documental Taurino que tan buena acogida tuvo el pasado año con el fin de que la plaza de Las Ventas siga siendo un lugar de encuentro cultural taurino. El Ciclo, que se desarrollará los sábados hasta 13 de diciembre, tiene lugar en lo que se ha venido en denominar el . Teatro “Ruedo Las Ventas”, carpa instalada en el ruedo por la empresa adjudicataria.
Además de todos estos actos, a lo largo de todo el año, el Centro de Asuntos Taurinos colabora con diferentes entidades, asociaciones y peñas taurinas en la celebración diversos actos organizados por ellas, cediendo las instalaciones de las salas existentes en la plaza de toros de Las Ventas para estos fines o patrocinando estos actos.
Y así, se pudo celebrar en la Gala de la Juventud Taurina, organizada en los Teatros del Canal desde 2012; el homenaje a “Serranito” con motivo de su 50 aniversario de alternativa, organizado por la Peña Los Mayorales de Colmenar Viejo; las Jornadas Culturales de Torrelaguna, organizadas por la Peña Manuel Vidrié, y de Colmenar Viejo, promovidas por la Peña Tierra de Toros; la exposición itinerante de la pintora Isabel Rivas en Buitrago de Lozoya, Pinto, Navacerrada, Nimes (Francia) y Guadarrama, o la exposición itinerante del fotógrafo Julián Madrigal en Torrelaguna.
Además de todos estos actos, a lo largo de todo el año, el Centro de Asuntos Taurinos de la Comunidad de Madrid, colabora con diferentes entidades, asociaciones y peñas taurinas en la celebración diversos actos organizados por ellas, cediendo las instalaciones de las salas existentes en la plaza de toros de Las Ventas para estos fines o patrocinando, entre otros:
Por otro lado, desde el año 2011 el Centro organiza y patrocina el Certamen de Escuelas Taurinas de la Comunidad de Madrid, retransmitido por Canal + y que se celebra en tres localidades distintas cada año de la Comunidad entre los alumnos de las cuatro escuelas de Madrid.
Añádase a todo lo anterior el mantenimiento y la actualización del Museo Taurino, que año tras año sobre en su número de visitantes, y el desarrollo del programa de trabajo entorno a la Biblioteca Cossío..
El caso de Sevilla
Pero otro tanto ocurre en la Real Maestranza de Sevilla, institución que durante todo el año mantiene vivo su programa cultural, junto a lo que son actividades permanentes, como el magnífico Museo Taurino –año tras año cuenta con un verdadero record de visitantes-- , el mantenimiento y ampliación de su muy importante fondo documental y pictórico y su apoyo a la Cátedra “Comunicación y Tauromaquia”, que con el nombre de Ignacio Sánchez Mejías desarrolla su actividades académicas en la Universidad de Sevilla, la principal de las cuales es el curso “Sociología, Tauromaquia e Información” y el seminario “Cultura y Tauromaquia: nuevas perspectivas artísticas”, ambos incorporados al programa lectivo de la Facultad de Comunicación.
Junto a ciclos de conferencias que habitualmente se organizan, en la actualidad está desarrollando a través de su Aula Taurina el Curso de Principios Básicos, que en esta ocasión ha inaugurado el matador de toros Pepe Luis Vargas, con una lección sobre “Arte de torear. Técnicas del toreo”.
De manera estable mantiene cuatro colecciones de publicaciones: los Pregones anuales de la feria de abril; la colección “Tauromaquia”, que ya cuenta con 17 títulos en las librerías; la colección “Imágenes de la Maestranza”, con siete títulos en su haber; y un conjunto de otras publicaciones especializadas, una de carácter peri
ódicos, como la Revista de Estudios Taurinos, y otras de carácter especial.
En otros lugares
Sin embargo este esfuerzo cultural no es patrimonio de Madrid y Sevilla, en otras muchas ciudades se viene produciendo lo mismo. Ahora, por ejemplo, se acaba de iniciar un programa de trabajo muy diversificado, que va desde lo gastronómico a lo estrictamente taurino, en el entorno dela la Plaza de toros de Málaga y de su Museo Taurino.
También en el entorno de la Plaza de Toros de Valencia y de su Museo se sigue una dinámica cultural. Y así podría seguir la relación, en la que nos encontramos con casos tan singulares como el de Roquetas de Mar, que realiza un esfuerzo muy importante para dar vida durante todo el año a su Museo Taurino.
La relación sería extensísima. Y así, no pueden olvidarse las jornadas especializadas sobre el ganado bravo de Zafra, las actividades de las Aulas Taurinas Universitarias, hasta llegar a los ciclos de conferencias que son habituales en tantas y tantas Peñas Taurinas distribuidas por toda la geografía.
De todo este sin número de actividades culturales, de la más modesta a la más abrillante, sí que podría predicar que constituyen la realidad callada del Toreo.
